El Gobierno regional ha exigido al Gobierno de España que realice las obras pendientes, y prometidas por el Ejecutivo central anterior, en nuevas zonas de regadíos para Castilla-La Mancha.
A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa para presentar el borrador del documento regional de posición en materia de agua, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Francisco Martínez Arroyo, ha asegurado que la Junta de Comunidades continuará pidiendo al Gobierno que lleve a cabo las obras que deberían haber estado concluidas en 2017.
Así, ha explicado que los ministerios de Transición Ecológica y Agricultura -ambos con competencias en materia de agua para regadíos- tienen que cumplir el compromiso del Gobierno anterior, que se remonta al año 2014, de realizar una serie de inversiones en Castilla-La Mancha en nuevos proyectos de regadío.
Martínez Arroyo ha remarcado que ya se han agotado todos los plazos correspondientes a los años 2016 y 2017 y que se trata de obras de "enorme calado", por lo que espera que el actual Ejecutivo de Pedro Sánchez "acelere" estos proyectos cuanto antes y se logren resultados positivos que, sin embargo, no se dieron con el Gobierno de Mariano Rajoy, ha lamentado.
En concreto, ha precisado que los proyectos a los que se había comprometido la Administración central son regadíos en el Campo de Montiel, en la cuenca del Guadalquivir y en concreto en el Valle del Alcudia; los regadíos de Mora y el canal bajo del Alberche en la provincia de Toledo, la ejecución de bombeos en la cuenca del Segura en Albacete, y los regadíos de Illana-Leganiel en las provincias de Guadalajara y Cuenca.
De estos, solamente se han iniciado las obras para llevar el agua a las explotaciones en el canal bajo del Alberche y se han ejecutado las primeras actuaciones en Illana-Leganiel, algo que para que Martínez Arroyo es insuficiente ya que, ha reiterado, todas las obras deberían haber estado terminadas el año pasado.
