La Asamblea General de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España (Fenacore) ha elegido este a Juan Valero de Palma como su nuevo presidente para los próximos cuatro años, en sustitución de Andrés del Campo.
Del Campo, que ha estado 27 años al frente de la federación, ha sido nombrado presidente de honor y ha recibido un reconocimiento a toda un vida dedicada a la gestión del agua, han indicado fuentes de Fenacore.
Valero de Palma, que hasta ahora era secretario general de la federación de regantes, ha apostado en su discurso de toma de posesión por activar automáticamente la declaración de emergencia de las obras hidráulicas en casos de sequías severas como la actual.
Tras analizar los efectos de la "dramática" falta de agua en el campo, ha subrayado las dificultades para regar que sufren muchas zonas en el país y ha asegurado que, sin embalses, sería imposible garantizar el abastecimiento de la población, ya que más del 80 "evitar guerras políticas por el agua y devolver el protagonismo perdido en la agenda del Gobierno".
También pretende alcanzar un Pacto de Estado por el Agua para luchar contra las sequías e inundaciones, rebajar los costes de producción, enmendar la planificación hidrológica para garantizar el agua de riego y estrechar el diálogo con otras asociaciones agrarias en defensa de los intereses del sector.
Valero de Palma ha remarcado la necesidad de completar el proceso de modernización de los regadíos y llevar a cabo una digitalización completa, lo que puede ayudar al rejuvenecimiento del campo español.
Además, ha abogado por concienciar a la opinión pública sobre los beneficios que aporta la agricultura de regadío para afrontar el problema del reto demográfico, articular el paisaje o frenar la desertización y los incendios forestales.
El regadío produce hasta seis veces más que el secano y puede mitigar también los efectos inflacionistas en la cesta de la compra debido a su elevada productividad, según la asociación.
Abogado especializado en Derecho de Aguas, Valero de Palma es miembro fundador de la Comunidad EuroMediterránea de Regantes, ejerce de tesorero de "Irrigants de Europe" (que representa al regadío ante la Unión Europea) y ocupa la secretaría general de la Acequia Real del Júcar y de la Unidad Sindical de Usuarios de ese río.
Entre otras responsabilidades, ha sido miembro del Consejo de Administración de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) en la Meseta Sur y vicepresidente del Foro del Agua.
También ha integrado el comité asesor externo de un proyecto dedicado a evaluar y predecir los efectos del cambio global en la cantidad y la calidad del agua en los ríos ibéricos (Scarce) y de otro coordinado por la Universidad Politécnica de Valencia y la Universidad de Córdoba sobre cómo hacer frente a la escasez de agua y el riesgo de sequía en el sur de Europa.
