El consumo de aceite de oliva no se ha resentido a pesar las 80.000 toneladas vendidas, en un mes complicado como es agosto, según datos de mercado del aceite de oliva hechos públicos este martes por el sector agrario, remitiéndose a la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA).
Estos últimos datos ponen de manifiesto que el sector productor finalizará la campaña 2022/2023 con menos aceite en las bodegas de los últimos años, aunque mantiene la buena tendencia del consumo, a pesar de que la cifra de ventas ha disminuido algo con respecto a julio.
Este mes inhábil, se cierra con unas existencias totales de 321.183 toneladas, que se reparten en 116.821 toneladas en poder de las cooperativas y almazaras; 195.848 toneladas en manos de los envasadores y 8.514 toneladas en el Patrimonio Comunal Olivarero.
Así lo ha explicado COAG, remitiéndose a cifras de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA).
El mes de agosto ha mantenido la buena tendencia del consumo de aceite de oliva, a pesar de que la cifra de ventas ha disminuido algo con respecto a julio.
Las 80.000 toneladas vendidas (incluyendo las importaciones) hacen que la cifra total de salidas en 11 meses de campaña alcance ya las 975.000 toneladas, datos que demuestran que los consumidores, especialmente las exportaciones, siguen fieles a la grasa vegetal más saludable del mundo.
Según las organizaciones agrarias, se va a llegar al inicio de la próxima cosecha, cuyas previsiones son malas también, con el menor enlace del siglo, que ahora mismo se queda en 321.183 toneladas de existencias.
El vicesecretario general de UPA Andalucía, Francisco Moreno, ha confirmado que los datos hechos públicos por la AICA demuestran que la comercialización, "a pesar de la tensión en los mercados", continúa un mes más dando buenas noticias al sector olivarero.
"Estamos vendiendo el aceite producido en una mala campaña, en la que tenemos 664.034 toneladas a nivel nacional, y aún así, un mes más nos encontramos con buenos datos de comercialización, aunque en el mes de agosto haya disminuido algo la venta con respecto a julio y al resto de meses" ha indicado Moreno.
"Llegaremos con el enlace entre campañas más bajo del siglo e insistimos en que el problema es que vamos a sumar dos campañas consecutivas malas, porque las previsiones sitúan una cosecha 2023/2024 que, en el mejor de los escenarios, será igual o algo superior a la actual", explica Francisco Moreno.
En la misma línea, el gerente y portavoz de Asaja-Jaén, Luis Carlos Valero, ha explicado que "teniendo en cuenta que agosto es casi inhábil, hemos tenido unas salidas que supondrían la mitad de la media del aceite comercializado, quedando unas disponibilidades de unas 321.000 toneladas para septiembre y para enlaza octubre y noviembre.
A pesar de que el enlace se prevé corto para los próximos meses, las lluvias y la recolección temprana podrían revertir esta situación.
"No obstante, si la climatología sigue siendo favorable durante septiembre y octubre, es muy factible que la recolección se adelante en algunas zonas de la geografía peninsular, especialmente buscando los aceites de una calidad extrema, no habiendo problema en ese caso para enlazar con suficiente disponibilidad", ha destacado Valero.
Desde COAG Jaén se ha señalado que "es especialmente llamativo las bajas existencias de aceite en manos del sector productor, que hace muchos años que no vivía una cifra tan baja, mientras que los envasadores mantienen sus existencias, mes a mes, alrededor de las 200.000 toneladas de aceite". según su secretario, Juan Luis Ávila.
Por otro lado, según esta organización agraria, las salidas de aceite al mercado continúan siendo buenas, a pesar de ser agosto un mes inhábil, y del precio que se mantiene en origen de media en los 7-8 euros y que apenas si repercute en las arcas de los agricultores, que ya en su gran mayoría vendieron su aceite.
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