Ni las previsiones más optimistas esperaban ayer un respaldo masivo a la protesta que, bajo el lema 'Futuro y respeto para el campo murciano', habían convocado conjuntamente las organizaciones agrarias COAG, Asaja y UPA en la Región, puesto que la afluencia de personas, tractores, vehículos pesados y maquinaria agraria desbordó las previsiones.
La Delegación del Gobierno, que anunció que escoltaría a unos 250 tractores hasta Murcia desde diversos puntos de la geografía regional, se quedó corta ya que esta cifra prácticamente se duplicó, mientras que los convocantes no eran capaces de cuantificar el número de asistentes al echar la vista atrás y no divisar el final de la manifestación.
"Creemos que serán unos 6.000, pero la verdad es que no lo sabemos, son muchísimos, varios miles", comentaba uno de los organizadores en las inmediaciones del Puente de los Peligros, desde donde se aprecia mejor la visión de la Gran Vía al estar unos metros más elevado. "Ha sido un exito rotundo", añadió.
A los asistentes se sumaron de forma espontánea los propios vecinos de Murcia, que se agolpaban en las aceras para aplaudir al sector agropecuario a modo de reconocimiento. "Han estado al pie del cañón en la pandemia y ahora los tratan con desprecio, como si trabajar la tierra y los animales fuera algo malo. Es increíble", relataba María, una administrativa que había bajado a la calle para apoyar a los manifestantes junto a varios de sus compañeros de oficina.
De la misma opinión era José Manuel (abogado), para quien "es de justicia que paremos nosotros unos minutos para mostrales nuestro respaldo y agradecimiento. Ellos, y nosotros como consumidores, somos los que pagamos los abusos de la cadena de precios", a lo que Raquel (cuidadora) añadió que "la cesta de la compra está disparatada, mientras a los agricultores les pagan una miseria".
El apoyo a la protesta, que transcurrió sin incidentes y colapsó durante dos horas el centro de la capital murciana, tuvo su reflejo también en los partidos políticos. Todos, salvo Podemos, asistieron a la manifestación, al igual que diversas autoridades regionales, encabezadas por el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, y alcaldes como los de Águilas, Archena o Lorca, entre otros. Todos ellos se unieron a la marcha entremezclándose con los asistentes ya que, por expreso deseo de los organizadores, la pancarta principal fue portada exclusivamente por los convocantes y las asociaciones de productores, cooperativas y regantes.
No obstante, el protagonista político de la protesta fue el presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, que se unió por sorpresa al recorrido, acompañado por la diputada, Macarena Olona, así como de miembros del partido en la Región de Murcia y el sindicato Solidaridad. Abascal, que condujo uno de los tractores adornado con las siglas de la formación, departió con los asistentes, escuchó sus demandas y se estuvo haciendo fotos en Gran Vía hasta una hora después de que se pronunciaran los discursos de cierre con los que se finalizó la protesta a las puertas de la Delegación del Gobierno de Murcia.
FUTURO Y RESPETO
Bajo el sonido constante de los claxon de los tractores, los organizadores han reclamado el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria que evita vender por debajo de los costes de producción.
Rebajar los costes de producción, abaratar los precios de los carburantes y el agua o endurecer las condiciones sanitarias para la importación de productos de países extracomunitarios han sido otras de las exigencias lanzadas durante la protesta.
En la manifestación, preludio de la convocatoria nacional que se celebrará el 20 de marzo en Madrid, también ha habido reclamaciones al Ejecutivo para que rebaje el precio del agua desalada hasta los 0,30 euros por metro cúbico.
El trasvase Tajo-Segura también protagonizó la marcha exigiendo los convocantes que el nuevo plan del Tajo no recorte cada años 100 hectómetros cúbicos anuales debido al aumento de caudales ecológicos.
