Unos 4.000 agricultores y 500 tractores, según los convocantes, cortaron el pasado viernes la AP-4 entre Sevilla y Cádiz a la altura de El Cuervo (Sevilla), desde las 11.00 hasta las 14.00 horas, para visibilizar su protesta por la crisis del campo derivada de la nueva PAC, de los elevados costes de producción y de los bajos precios que reciben los productores.
Este corte se ha producido con motivo de una movilización convocada por Asaja, COAG, UPA y Cooperativas agroalimentarias de Andalucía a la altura de la localidad sevillana de El Cuervo, y en la que, según los convocantes, han participado unos 500 tractores y unos 4.000 agricultores y ganaderos.
El corte de tráfico en la AP-4, que ha provocado retenciones en la N-IV entre Sevilla y Cádiz como vía alternativa a la autopista, estaba autorizado por la Delegación del Gobierno para personas y vehículos no pesados, pero hubo algunos momentos de tensión entre los agentes antidisturbios y los agricultores, han informado fuentes de las organizaciones agrarias.
Sus reivindicaciones apuntan al ministro de Agricultura, Luis Planas, para que modifique el Plan Estratégico de la PAC, que se aplicará del 2023 al 2027 y provocará pérdidas de 450 millones a los agricultores y ganaderos en Andalucía, si bien perjudica especialmente a los de algunas comarcas de la provincia de Sevilla, que un impacto de unos 230 millones con la nueva PAC.
También demandan las organizaciones un plan de choque que ponga coto al incremento de los costes; una revisión de los acuerdos comerciales para exigir la reciprocidad en las producciones de terceros y el incremento de las medidas de control en frontera para evitar la entrada de plagas y exigir el cumplimiento estricto de los contingentes y las fechas de entrada; adecuar la legislación y los coste laborales a la realidad del campo, y la puesta en marcha de la Ley de la Cadena Alimentaria para que se garanticen uno precios en origen justos.
Durante la protesta el presidente de Asaja-Sevilla, Ricardo Serra, ha manifestado a los periodistas que esta movilización es una "llamada de atención al Ministerio para que no siga adelante con la reforma prevista" de la Política Agraria Comunitaria y para que solucione los problemas de los elevados precios de los combustibles, piensos y fertilizantes, entre otros.
Es una "llamada de auxilio a los responsables políticos de que basta de que nos cuenten más mentiras", ha afirmado Serra, quien ha advertido de que, si no "quieren escuchar", seguirán adelante con las movilizaciones, que suspendieron en enero por responsabilidad debido a la sexta ola de la pandemia del coronavirus.
El secretario general de COAG-Andalucía, Miguel López, ha reclamado al gobierno una mesa de negociación porque la crisis del campo es un "problema de Estado" y ha advertido de que la reforma de la PAC, la sequía y los altos costes de producción conducen a la ruina a muchas explotaciones andaluzas.
"El tijeretazo de la PAC llega en el peor momento, con los costes de producción y los costes laborales disparados; la competencia desleal de terceros países más fuerte que nunca, y los precios en origen hundidos", han denunciado las organizaciones agrarias.
De hecho, los costes de producción se han disparado para los agricultores y ganaderos "a niveles nunca vistos", y, así, los piensos para el ganado se han encarecido un 30 "Mientras esto ocurre, los alimentos siguen encareciéndose en la cesta de la compra para los consumidores, que pagan más por los productos que adquieren, lo que no repercute en los agricultores y ganaderos, el primer eslabón de la cadena alimentaria", denuncian los convocantes, que no descartan realizar más protestas en Andalucía antes del 20 de marzo, cuando hay convocada una gran manifestación en Madrid de todo el sector.
