España es el país europeo que más superficie aporta a la Red Natura 2000

España es el país europeo que más superficie aporta a la Red Natura 2000, el proyecto de conservación de la naturaleza en la Unión Europea que constituye el conjunto de áreas naturales protegidas más extenso del mundo, según han puesto de manifiesto el director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Daniel Calleja Crespo, y la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García Rodríguez...

España es el país europeo que más superficie aporta a la Red Natura 2000, el proyecto de conservación de la naturaleza en la Unión Europea que constituye el conjunto de áreas naturales protegidas más extenso del mundo, según han puesto de manifiesto el director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Daniel Calleja Crespo, y la secretaria de Estado de Medio Ambiente, María García Rodríguez.

Ambos han clausurado en Madrid el Foro Internacional sobre la Contribución de la Industria Extractiva a la Red Natura 2000, organizado por Cominroc, en un año en que se celebra el XXV aniversario de la aprobación de la Directiva Hábitats que, entre sus principales logros, destaca por la creación de la Red Natura 2000, la principal herramienta para abordar el reto de disminuir la pérdida de la diversidad biológica y de cumplir con los objetivos marcados en la Estrategia Europea sobre la biodiversidad hasta 2020.

El director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea ha resaltado que “España es el país de la Unión Europea que más se ha comprometido en la defensa de la naturaleza, de la biodiversidad, designando espacios y zonas naturales, que van 10 puntos por encima del porcentaje de la UE”.

En este sentido, la secretaria de Estado de Medio Ambiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha detallado que España, efectivamente, “es el Estado que aporta una mayor superficie terrestre al conjunto de la red europea, con un 18 "background-color: initial;">

RED DE HOMBRE Y NATURALEZA


García Rodríguez ha destacado también que la Red Natura 2000 está concebida en su propia esencia como una red de “Hombre y Naturaleza” y que no debe considerarse como un obstáculo para el desarrollo, “sino un marco para que ese crecimiento sea sostenible, al compaginarlo con el respeto al medio ambiente, y, en particular, estamos seguros de que una Red bien ordenada y bien gestionada es una fuente de oportunidades para los ciudadanos que viven en ella”.

En este sentido ha señalado que se modificó la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad para dar prioridad en el acceso a subvenciones, a la realización de actividades coherentes con los valores que justifican la declaración de los espacios Red Natura 2000, para contribuir al bienestar de las poblaciones locales y a la creación de empleo.

“Lograr esa compatibilidad requiere mantener cauces de diálogo y cooperación, a todos los niveles, entre los promotores de estas actividades y los responsables de la gestión y conservación de la Red Natura”, ha sostenido.

Los documentos de directrices elaborados por la Comisión Europea, en colaboración con los Estados miembros, y, en particular, el dedicado a la industria extractiva no energética, constituyen un marco de referencia de gran utilidad en este sentido, ayudando a compatibilizar actividad humana y conservación de la biodiversidad dentro de la Red.