La Asociación Empresarial de Acuicultura de España (Apromar) se congratula de que la Comisión Europea (CE) haya acordado mantener las medidas arancelarias sobre las importaciones de trucha arco iris originarias de Turquía para los próximos seis años, revisables a los tres.
Fuentes de Apromar explicaron que esta decisión de la CE se sustenta en que sigue existiendo "riesgo de serio perjuicio" a los productores de trucha arco iris europeos, en contra de la petición del Gobierno turco, que pedía la supresión de aranceles argumentando que había realizado cambios en los sistemas de ayuda hacia sus productores de trucha arco iris.
Sin embargo, la Comisión de Europea realizó una investigación que abarcó desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre de 2019, comprobando que desde Turquía se seguía subsidiando de manera irregular la producción de este producto y, por tanto, se mantenían los arancales impuestos en 2015, precisamente a partir de la denuncia interpuesta por Apromar y otras asociaciones de productores de acuicultura de la Unión Europea en 2014.
Esos aranceles compensatorios establecidos en 2015 quedaron fijados entre el 1,5"notable crecimiento". En España la acuicultura de trucha arco iris es significativa (16.100 toneladas anuales ) y mantiene empleos en numerosos pueblos y zonas rurales.
La UE es de lejos el más importante mercado de exportación para los productores de trucha de Turquía, y representa el 55% de sus exportaciones totales de trucha. Sus exportaciones a la Unión Europea son un 59% más altas que las exportaciones a su segundo mayor mercado de exportación, que es Rusia, y que representa el 33% de sus exportaciones de trucha.
Juntos, los mercados de la Unión y Rusia, representaron el 85% de todas las exportaciones turcas de trucha arco iris, según los datos facilitados por la Asociación Empresarial de Acuicultura de España.
Finalmente, desde Apromar advirtieron que, a pesar de las medidas arancelarias vigentes, Turquía mantiene una cuota de mercado considerable en el mercado europeo, cercana al 14%, y algunos años del 17%. Este pescado se vende a un precio que, incluso con aranceles compensatorios, "subcotiza significativamente los precios de venta del sector de la trucha de la UE en el mercado de la Unión".
