Las autoridades policiales de 32 países, en su mayoría europeos, lograron incautar 2.040 toneladas de pesticidas ilegales durante un operativo internacional que también llevó al arresto de 21 sospechosos y al desmantelamiento de numerosas instalaciones de producción, anunció este miércoles Europol.
Las autoridades que participaron en el operativo llevaron a cabo inspecciones en las fronteras terrestres y marítimas, los mercados, los proveedores de servicios de paquetería y en los puntos de venta virtuales, lo que también permitió "identificar tendencias delictivas en productos fitosanitarios que surgían en el mercado negro" de la Unión Europea (UE).
Las tendencias identificadas incluyen la venta de productos falsificados, prohibidos e importaciones no reguladas, tanto a través de internet como en mercados físicos.
"Los casos de abuso en el comercio de pesticidas ilegales van desde el tráfico de productos falsificados o mal etiquetados hasta la importación irregular de sustancias prohibidas. Si bien Asia y el sur de Asia siguen siendo las principales regiones de origen de pesticidas ilegales, gran parte de la producción y el acabado se llevan a cabo en la UE", asegura Europol.
La agencia europea, que coordinó el operativo desde su sede en La Haya, recuerda que la industria de los pesticidas está "altamente regulada" en todo el mundo, por lo que las sustancias no reguladas "pueden ser extremadamente peligrosas para el medio ambiente y la salud humana".
"El uso de productos más baratos, ilegales y de mala calidad ha provocado la devastación de campos y otros ecosistemas, como las poblaciones de abejas. Además, los pesticidas falsificados e ilegales afectan negativamente a la economía de la UE y a la reputación de las partes legítimas en toda la cadena agroalimentaria", agregó la agencia europea.
La directora ejecutiva de Europol, Catherine de Bolle, aseguró que esta operación "pone de relieve el elevado coste de los productos fitosanitarios no autorizados" porque "estos productos químicos clandestinos pueden tener un precio bajo, pero tienen un alto coste para el medio ambiente, la salud pública, los medios de vida agrícolas e incluso el bienestar de nuestras colonias vitales de abejas".
En esta operación anual contra pesticidas falsos o ilegales, participaron todos los países de la Unión Europea, junto a Australia, Brasil, Ucrania, Reino Unido y Estados Unidos.
Además, el operativo movilizó a otras agencias europeas, como la oficina de propiedad intelectual (Euipo), la de lucha contra el fraude (OLAF), y la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea (DG Sante).
