El jefe de la delegación de Vox en el Parlamento Europeo (PE), Jorge Buxadé, aseguró que su partido "no se fía" del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y que "no tienen ninguna duda" de que no va a ayudar a los agricultores y ganaderos europeos, en un contexto de protestas generalizadas del sector en la Unión Europea (UE).
Buxadé, que se reunió esta tarde con el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, explicó en declaraciones a los medios que el comisario es partidario de permitir que los gobiernos de la UE otorguen a sus agricultores ayudas de Estado de hasta el 10 "no va a ayudar a los agricultores y ganaderos" aumentando su financiación para compensar sus pérdidas por la inflación, una propuesta personal de Wojciechowski que, sin embargo, según confirmaron a EFE fuentes comunitarias, no forma parte del paquete de medidas que está valorando la Comisión.
"Es el único político que aún no se ha quitado el pin de la Agenda 2030, que es el grito de guerra de los agricultores y ganaderos", añadió Buxadé, que se dirigió a la prensa tras la reunión, que tuvo lugar en un evento del Parlamento Europeo donde también participaron los consejeros de Agricultura de Vox de Castilla y León, Aragón, la Comunidad Valenciana y Extremadura.
En este encuentro, los consejeros entregaron a Wojciechowski un manifiesto con reivindicaciones del sector primario ante una situación que consideran "crítica" y donde inciden en la necesidad de "un cambio de rumbo" y piden una nueva PAC "simplificada y menos burocrática".
Asimismo, Buxadé aseguró que Vox no puede hacer una "valoración positiva" del trabajo del titular europeo de Agricultura, pero aseguró que la "primera y principal responsable" del descontent:encodedo del sector primario europeo es la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, seguida de su vicepresidente, Frans Timmermans, y de "la pandilla de fanáticos del clima".
El jefe de filas de Vox pidió, asimismo, que se apliquen las cláusulas espejo en los acuerdos comerciales con países de fuera de la UE para garantizar "la libre competencia de los agricultores y ganaderos" y abogó por que se puedan suspender estos acuerdos cuando los terceros países "no sólo compitan ilegalmente con los agricultores europeos, sino cuando además no colaboren con nosotros".
