Hungría y Eslovaquia se suman a Polonia y prolongarán el veto del grano ucraniano si Bruselas no lo hace

Hungría y Eslovaquia se han sumado a Polonia en su apoyo a una prórroga de la prohibición de importación de cereales de Ucrania, si la Comisión Europea no da ese paso antes del próximo viernes...

Hungría decidirá a nivel nacional sobre una eventual prórroga de la prohibición de importación de cereales de Ucrania, si la Comisión Europea (CE) no da ese paso antes del próximo viernes, anunció este miércoles el Gobierno húngaro.

"Si Bruselas no extiende la prohibición, el Gobierno lo hará a nivel nacional. Pedimos a Bruselas la prórroga de la prohibición, para no perjudicar la agricultura de los cinco países afectados", dijo el ministro de Gobernación, Gergely Gulyás.

Cinco países comunitarios -Hungría, Eslovaquia, Polonia, Rumanía y Bulgaria- pactaron con Bruselas un acuerdo temporal desde mayo para vetar la importación de cereales provenientes de Ucrania, que vence este 15 de septiembre.

El pacto permitió que esos cinco socios comunitarios prohibieran, de forma excepcional y temporal, la entrada de trigo, maíz, colza y girasol de Ucrania para proteger sus propios mercados, ya que debido a la guerra los productos ucranianos están libres de aranceles en la Unión Europa (UE) y son más baratos que los productos locales.

Eslovaquia se ha pronunciado de manera semejante a la húngara, mientras que Polonia también prometió ampliar el veto independientemente de la postura de Bruselas, un anuncio que Kiev tachó de "poco amistoso".

El único país que anunció que no mantendrá la prohibición de importación fue Bulgaria. 

Por su parte, el Gobierno de Eslovaquia extenderá de forma unilateral la prohibición de importar cereales de Ucrania más allá del próximo viernes, en caso de que la Unión Europea (UE) no dé su visto bueno a la prórroga de ese veto temporal que rige en cinco de sus miembros desde principios de mayo.

Así lo anunció este miércoles el ministro eslovaco de Agricultura, Josef Bires, al referirse al acuerdo que Eslovaquia, Polonia, Hungría, Rumanía y Bulgaria alcanzaron en abril pasado y que expira este 15 de septiembre.

El pacto permitió que los citados cinco socios comunitarios prohibieran, de forma excepcional y temporal, la entrada de trigo, maíz, colza y girasol de Ucrania para proteger sus mercados nacionales, ya que debido a la guerra los productos ucranianos están libres de aranceles en la UE.

Bires resaltó hoy, en una rueda de prensa en Bratislava, que su Gobierno está a la espera de lo que decida la Comisión Europea (CE) sobre una posible prórroga del veto.

Pero dejó claro que si no accede a extender su vigencia, el Ejecutivo eslovaco sí lo hará de forma unilateral.

"El Gobierno está preparado para, en un consejo de ministros extraordinario, prolongar la prohibición, en el caso de que la Comisión no lo haga" dijo el ministro.

El Gobierno de Ucrania ha calificado de "poco amistosa" la postura polaca y ha advertido de que denunciaría el embargo ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) si se prolonga tras el 15 de septiembre.

El Ejecutivo de Bulgaria anunció hoy que no mantendrá la prohibición más allá del viernes y que propondrá a la CE levantarla ese día, con lo cual es hasta ahora el único de los cinco que defiende esa posición, calificándola de solidaria con la Ucrania invadida y atacada por Rusia.