Alarma entre los almacenistas españoles de soja por la nueva norma contra la deforestación

Unistock ha mostrado su alarma por el futuro de la oferta de soja para piensos ante la entrada en vigor en 2025 de la normativa europea que busca minimizar el riesgo de que se importen productos asociados a la degradación forestal...

La Asociación Española de Almacenistas Portuarios de Granos, Cereales y otras materias primas (Unistock) ha mostrado su alarma por el futuro de la oferta de soja para piensos ante la entrada en vigor en 2025 de la normativa europea que busca minimizar el riesgo de que se importen productos asociados a la degradación forestal.

El presidente de Unistock en España, Andrés Gómez Bueno, ha apuntado a Efeagro que los operadores portuarios están "asustados", porque tanto el mercado español alimentario como el de otros países de la UE son dependientes de las importaciones de soja para fabricar piensos y en estos momentos hay dudas sobre si sus países suministradores cumplirán los requisitos de la nueva regulación.

Estados Unidos, Brasil y Argentina son los principales orígenes de los seis millones de toneladas anuales de haba y de soja que importa España, según Unistock, y de estos tres, Argentina es el país que ha mostrado tener más avanzadas sus certificaciones acordes con la nueva normativa.

Los almacenistas portuarios, que defiende un aplazamiento en la normativa sobre deforestación para encontrara alternativas se han reunido esta semana por este asunto, con la Embajada de Argentina en Madrid y con representantes del Ministerio de Transición Ecológica.

Según Gómez Bueno, la incertidumbre es tal que en estas fechas, a la altura de junio, "por primera vez en 40 años" los operadores no tienen contratos de futuros de soja con vencimiento para junio de 2025, lo que afecta a la planificación de muchos eslabones de la cadena alimentaria.

En concreto, ha añadido, afecta a los fabricantes de piensos, a la ganadería o los supermercados y a cuestiones como, por ejemplo, "cuánto costará el pollo o el cerdo" en 2025, por el precio de su alimentación.

Para los almacenistas, la normativa incluye aspectos como la penalización de hasta un 4 "colosales" para quienes la incumplan.

Esto está "mucho miedo" entre los operadores, que se abstienen de hacer contratos.

En este sector hay "constancia" de que Argentina es el país que más se ha esforzado por cumplir con la nueva norma, para garantizar que puede seguir enviando soja a la UE, pero no ocurre igual con Brasil ni con Estados Unidos e incluso en este último caso "no se sabe" qué medidas están tomando sus productores de soja, según la misma fuente.

"En Europa no se cultiva haba de soja y la importación se puede ver paralizada (...) esto puede tener mucho impacto en la producción de alimentos", ha señalado.

Gómez Bueno también ha detallado que existen dificultades técnicas como el sistema informático que se va a utilizar por parte de la UE para controlar el reglamento ya que, ha asegurado, "solo se van a poder hacer pruebas con él en diciembre" a un mes de la entrada en vigor de la normativa.

Otra razón que justifica, a juicio de Unistock, un aplazamiento de la aplicación y encontrar alternativas.

También esta semana en Bruselas, el Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (Ipcva) ha presentado un sistema de certificación -Visec Carnes- que garantiza que el producto que llegue a la UE provenga de ganaderías sin deforestación.