Las lluvias y las heladas dejan pérdidas millonarias en el campo valenciano

Las lluvias y las heladas de los últimos días en la Comunidad Valenciana han ocasionado pérdidas millonarias en la agricultura, que La Unió de Llauradors ha cifrado en 50 millones de euros y AVA-Asaja en más de 25 millones, según las primeras estimaciones.

La Unió ha destacado que estas pérdidas en el campo valenciano por el episodio de heladas que del 1 al 4 abril se han producido sobre todo en las comarcas de interior de las tres provincias, aunque también en otras más cercanas al litoral, se suman a los 11 millones que ocasionaron previamente las lluvias persistentes.

La organización agraria considera que las heladas han afectado a más de 35.000 hectáreas, sobre todo en la provincia de Valencia (el 64 "/images/showid/5213734.jpg" alt="Daños heladas y lluvias abril2022 (Foto AVA Asaja)">

Por su parte, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) considera que la acumulación de las precipitaciones y de las heladas en un momento tan avanzado de la temporada va a causar más de 25 millones de euros de pérdidas a los agricultores y ganaderos de la Comunidad.

Las producciones más afectadas por este episodio de frío son las almendras, las frutas de hueso y el caqui, así como cítricos, hortalizas y sectores ganaderos como la apicultura, señala la organización agraria, que pide mejoras en el seguro agrario y medidas fiscales para aliviar las pérdidas.

La asociación apunta a que el frío puede haber echado a perder en torno al 90 % de la producción de almendras en la comarca de Utiel-Requena, donde hay campos con todas las flores y los brotes 'quemados', y también hay almendras heladas en el Valle de Ayora, Los Serranos o la Hoya de Buñol.

Las frutas de hueso han sufrido una afección de hasta el 100 % en zonas hondas y frías de comarcas productoras como La Ribera Alta, La Vall d’Albaida y el Valle de Ayora, y entre las frutas más castigadas por el frío destacan melocotones, nectarinas, paraguayos, albaricoques, cerezas y ciruelas.

Parcelas de caquis que ya habían arrancado la brotación pueden haber perdido gran parte de la cosecha en La Ribera o Camp de Túria, mientras que flores de cítricos y hortalizas como patatas, cebollas, lechugas o coles han agravado los daños de las lluvias de marzo.

La acumulación de días lluviosos, nublados y fríos también ha causado mortandad de abejas por falta de comida, además de cuantiosos sobrecostes en alimentación animal y calefacción a varios sectores ganaderos, aseguran.