Los beneficios de la uva varían según procedan de la semilla o del vino

Los beneficios de los taninos de la uva son distintos si proceden de partes sólidas del racimo, como la piel, el hollejo y las pepitas, o si el fruto se ha convertido ya en vino, según un estudio del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa) Alameda del Obispo, de Córdoba...

Los beneficios de los taninos de la uva son distintos si proceden de partes sólidas del racimo, como la piel, el hollejo y las pepitas, o si el fruto se ha convertido ya en vino, según un estudio del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa) Alameda del Obispo, de Córdoba.

Si el consumo se hace de las partes sólidas, se mejora la circulación sanguínea, la memoria y el aprendizaje y si hace en vino se protege frente a enfermedades cardiovasculares y degenerativas, conforme a los resultados de los ensayos realizados con ratones con el consumo de estos antioxidantes.

La Fundación Descubre, que ha dado a conocer este lunes el trabajo del equipo de científicos del área de 'Alimentación y Salud' del IFAPA Alameda del Obispo, ha informado de que se han identificado qué moléculas ejercen los beneficios saludables de los taninos.

Los expertos han comprobado que tras la ingesta de estos compuestos, formados por varias unidades de un antioxidante llamado epicatequina que le confiere propiedades astringentes y también es responsable del amargor característico del vino, los procesos de absorción y transformación en el organismo de los taninos, cambian dependiendo de su origen.

Si se obtienen del vino, tal y como señalan estudios previos, protegen frente a enfermedades cardiovasculares y degenerativas, al mismo tiempo que presentan propiedades antibacterianas y antienvejecimiento, mientras que si se encuentran en la semilla de la uva, su consumo mejora la circulación sanguínea y la función vascular, así como también aumentan la capacidad de memoria espacial y contrarrestan el estrés oxidativo.

El estudio ha contado con la participación de la Universidad de Parma (Italia), la Universidad de Davis (Estados Unidos), la Universidad de Montpellier (Francia) y del Wine Research Institute (Australia).